Una de las cosas que puede resultar más divertido y entretenido para un niño, es jugar a disfrazarse, y de manera rápida y sencilla podemos ayudarle a hacerlo, e incluso hacerlo con ellos. Las máscaras, caretas... es un elemento decorativo que puede ayudar a su juego.
Estas caretas, por ejemplo, están hechas en Foam que es un material blando y cómodo para que pueda ser utilizado por niños. Otra ventaja respecto a otro tipo de máscaras, es que es un material más duradero que si las hacemos en cartón, cartulina u hojas. Además el foam suele tener colores muy alegres y vivos, que llaman más la atención de los pequeños, y con un poquito de pegamento es fácil añadirle cualquier decoración.
Los dibujos que he utilizado en estos casos los saqué de internet, que es una gran fuente de información, y quiero agradecer por ello a las personas que los colgaron su aportación. Ese dibujo, o uno que vosotros mismos pintéis será la plantilla que calcaremos a la plancha de foam para hacer la silueta. Luego lo demás es todo decoración que se puede ir haciendo como te guste, copiarla, o añadirla con retales de otros materiales (telas, fieltro, plástico, cartulina...), así como en este caso dibujando con rotuladores de relieve que dan un bonito efecto.
Os preguntaréis, ¿si es una máscara por qué tiene los ojos sin punzar? En este caso, es la plantilla de unas caretas, pero lo he realizado sin punzar los ojos porque va a ser decoración para la habitación de un niño, pero es igual, que cuando lo hago para caretas, excepto que habría que punzarle o recortarle los ojos.
Espero que os hayan gustado.
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